Guía se moviliza para rescatar el edificio María Auxiliadora
El lunes se constituye una plataforma ciudadana que luchará por su uso sociosanitario
Amado Moreno //
La ciudadanía de Guía parece dispuesta a movilizarse de nuevo. En el pasado lo hizo para rechazar un centro penitenciario que el Gobierno central pretendía ubicar en su municipio. Ahora quiere hacerlo para rescatar el emblemático edificio María Auxiliadora, antiguo Colegio Salesiano, en estado calamitoso desde hace décadas. Profesionales destacados de la docencia, la Abogacía y la Medicina, así como líderes vecinales, formarán parte de una plataforma ciudadana cuyo objetivo es impulsar el uso sociosanitario del centro, considerado como una de las urgencias del municipio y la comarca, en la que centenares de familias viven un auténtico drama por falta de medios para atender adecuadamente a sus mayores.
Los promotores de la plataforma han convocado para el lunes próximo su primer encuentro. No ocultan que la denuncia formulada en octubre del pasado año por LA PROVINCIA-Diario de Las Palmas sobre la escandalosa degradación del aludido edificio significó el pistoletazo que ha despertado la conciencia colectiva para luchar por su recuperación y resolver al mismo tiempo una de las necesidades apremiantes.
Los emprendedores que encabezan este movimiento ciudadano no están vinculados a banderas de partidos políticos, ni se proponen una confrontación con instituciones o gobiernos. Al contrario. Esperan su colaboración y receptividad ante una justa demanda como la que plantean. No obstante, anticipan que no rehuirán la beligerancia pacifista si tropiezan con la indiferencia o insensibilidad de los responsables públicos.
El Gobierno local presidido por Pedro Rodríguez ve en principio como positivo y sin recelos este movimiento ciudadano. También buena parte de la oposición municipal coincide en que se analice seriamente la posibilidad de destinar el inmueble citado para fines sociosanitarios.
El Obispado, heredero del legado patrimonial de doña Eusebia Armas Almeida, la gran benefactora y fundadora del centro educativo María Auxiliadora, ha declarado recientemente al alcalde guiense, Pedro Rodríguez, su disposición a facilitar el cambio de uso para residencia de mayores, como valora ya el ayuntamiento norteño, y sin exigir contrapartidas económicas a cambio, siempre que un organismo público se haga cargo de la pertinente rehabilitación y mantenimiento.
A partir de aquí, todos los agentes implicados en el reto del futuro sociosanitario califican como clave arrancar del Gobierno Clavijo, y en concreto de su consejera de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda, Cristina Valido, el compromiso de financiar las obras de remozamiento, y posteriormente, la firma del convenio con el Cabildo de Gran Canaria para el sostenimiento de un centenar de plazas, cifra en la que se estima la capacidad del inmueble, una vez restaurado. Al respecto se evoca el reciente acuerdo adquirido por el mismo Gobierno canario con el ayuntamiento tinerfeño de Guía de Isora -hermanado históricamente años atrás con el de Guía de Gran Canaria- para una residencia de mayores.
«El edificio de los Salesianos reúne unas condiciones excepcionales para acoger un centro sociosanitario», afirma Inmaculada González Nuño, profesora y una de las animadoras relevantes de la plataforma ciudadana. Subraya su imponente arquitectura, espléndida localización y «por justicia histórica con doña Eusebia, su promotora». Puntualiza que si ella pudiera comprobar hoy en día que la escolarización y la educación es accesible, universal y gratuita «vería con buenos ojos que su obra se destinara a resolver uno de los problemas sociales más acuciantes del lugar en el que nació y murió: la atención de nuestros mayores».
Al fin y al cabo se trata, dice, de recuperar su importante legado para lo que nació: para dar cobijo y respuesta a los más necesitados. Inapelable conclusión la suya.
Residencias públicas en la comarca
El municipio guiense ya cuenta con un centro de mayores de 29 plazas en La Atalaya, y otro de día en el casco urbano con atención a 36 personas. Su vecina Gáldar tiene una en Barrial para 48 residentes, y 10 de día. Arucas registra 49 internos, y 74 sólo de día, repartidos también en locales de La Goleta y Cardones. La de Moya cuenta con 14 ingresados, y 13 de día. Y La Aldea de San Nicolás, 30 residentes, más 13 durante el día. La financiación de todos estos centros públicos corre a cargo del Gobierno regional y el Cabildo de Gran Canaria a partes iguales, es decir, un 50 por ciento cada uno. El coste de la plaza ocupada de «medio requerimiento» es de 57,11 euros al día, y la de «alto requerimiento», 65,32 euros. Los ayuntamientos respectivos se reservan la gestión.
NOTA.- publicado en La Provincia el 8/2/2017